Un grupo de indignados, convocados desde la acampada de la Puerta del Sol, ha protestado en la sede de la CEOE y frente al Ministerio de Trabajo para exigir la paralización de la reforma de la negociación colectiva que hoy aprueba el Gobierno.
En la concentración ante el Ministerio de Trabajo, los indignados han denunciado que la reforma supone "la legalización de la esclavitud", y han lanzado cánticos como "Manos arriba, esto es un atraco" y "Esta reforma la vamos a parar".
Con una pancarta que rezaba "Ya ha empezado", los indignados han permanecido sentados en el suelo, vigilados por una decena de agentes.
Los concentrados también han clamado contra los sindicatos CCOO y UGT por no convocar una huelga general, al grito de "dónde están no se ven, Comisiones y UGT".
'Esclavos' en la CEOE
Casi simultáneamente, otro grupo, de unos 40 jóvenes, han entrado en la recepción de la sede de la CEOE y han representado una sátira en la que supuestos capataces ofrecían jóvenes maniatados y amordazados a un personaje enmascarado y con levita, al que llamaban 'Don Dinero', al tiempo que le invitaban a contratarles como becarios por un periodo de 20 años y le aseguraban que los aspirantes estaban dispuestos incluso a pagar por trabajar.
"Vamos", decía el personaje 'Don Dinero', "negociemos colectivamente el precio de estos esclavos".
El grupo ha permanecido durante unos cinco minutos en la recepción de la sede de la patronal en un acto que ha transcurrido sin incidentes, según reconocen fuentes de la patronal.
Tras la representación, una de las congregadas ha leído un manifiesto contra la reforma de la negociación mientras los otros indignados entonaban cánticos denunciando la actual situación del mercado de trabajo, como "Manos arriba, esto es un contrato".
Los manifestantes han asegurado que la acción llevada a cabo era a título individual a pesar de sentirse vinculados al movimiento 15-M.