Norteamérica nunca celebra el primero de mayo a pesar de ser simbólicamente la protagonista de esta celebración en todo el mundo . Por primera vez los norteamericanos secundan jornadas reivindicativas en esta señalada fecha. La huelga fue seguida por los ciudadanos sin que hubiera convocatoria previa de los sindicatos. Aeropuertos internacionales como el de Los Angeles , California , no tuvieron ninguna actividad durante el día de ayer.
Esto provocó que en ciudades como Nueva York, Oakland, Los Ángeles, Washington y muchas otras se conociera de cerca el arsenal ‘de guerra’ de la Policía de los U.S.A. , consistente en porras, spray de pimienta y gas lacrimógeno, e incluso armas pesadas y proyectiles. Al más puro estilo de los desfiles del primero de mayo en la antigua Union Soviética (URSS) , pero en esta caso con intervención real contra los ciudadanos y sin el cariz de celebración de los desfiles.
El éxito de participación pacífica y reivindicativa en todo el mundo, contrasta gravemente con la brutal represión sobre los manifestantes Norteaméricanos.
El modelo de democracia y moralidad con el que se autopublicita Estados Unidos queda cada vez más en entredicho. con continuas actuaciones represoras que no atienden ni a la edad, ni a la condición física o de salud de los manifestantes. Heridos en redadas contra el movimiento Ocuppy Wall Street. Ancianos que pierden la vista por gases lacrimógenos. Toda una retahila de muestras represivas en consonancia con las políticas demoledoras que están masacrando los derechos , libertades y formas de vida de los ciudadanos en todo el planeta.
La política aplicada por los EE.UU fuera de sus fronteras (Afganistán, Irak, Libia) coincide de forma alarmante con su gestión interna de control a la población. Quienes mantienen activas sus protestas en defensa de los derechos civiles denuncian la actitud de las autoridades norteamericanas a la hora de acallar de forma violenta los indicios de una opinión disonante, como ha ocurrido en cada una de las manifestaciones contra los políticos corruptos y la codicia de las grandes corporaciones por todo el país.
“En vez de respetar los derechos de su propio pueblo, Gaddafi eligió el camino de la represión brutal. Civiles inocentes han sido encarcelados”, dijo en un discurso el presidente Barack Obama.
“Es una parodia de la democracia. Las autoridades suprimen el derecho del pueblo de reunirse y protestar”, lamenta el capitán de Policía de Filadelfia retirado Ray Lewis.
Las fuerzas policiales “han sido militarizadas” ya que “colaboran cada vez más con el Pentágono y el FBI”, dice el director de cine y bloguero Danny Scheckter. La Policía “compra o recibe munición que fue pensada para usarla en la guerra” y “trata al pueblo como si fuera un enemigo”.