Ocho personas de la misma familia perecieron en la parte oriental de Afganistán este sábado 26 de mayo tras un bombardeo de las fuerzas de la OTAN. "Los oficiales de la coalición de momento están comprobando la información", dice el comunicado oficial.
Rohullah Samon, portavoz de las autoridades de la provincia de Paktia donde se produjo el caso, declaró que Mohammad Shafi, su esposa y sus seis hijos murieron en un ataque aéreo alrededor de las 8 de la tarde, hora local, en la aldea de Suri Khail. "Shafi no era un talibán. Tampoco pertenecía a ningún grupo opositor. Era un lugareño", declaró Samon. "Ahora estamos investigando el caso para establecer las edades de sus hijos y cuántos eran chicos y chicas", agregó.
Los bombardeos de la OTAN que causan muertes de civiles erosionan cada vez más la confianza del pueblo afgano en las fuerzas internacionales. "Si las vidas de los afganos no están aseguradas, la firma de una cooperación estratégica no tiene sentido", declaró el presidente Hamid Karzai a principios de este mes. Las preocupaciones de Karzai salieron a la luz tras la muerte de 18 civiles en cuatro bombardeos en las provincias de Logar, Kapisa, Badghis y Helmand.