Un nuevo virus informático detectado en Oriente Medio podría ser mucho más potente y peligroso de lo que se creía, según la empresa rusa Kasperski Lab. Una eventual ciber-epidemia, puede acarrear consecuencias catastróficas para la humanidad.
El peligro apocalíptico que 'palpita' en las máquinas en realidad no tendrá nada que ver con los robots asesinos de la película 'Terminator' que aterrorizaban y exterminaban a la humanidad.
Kasperski Lab, la empresa rusa líder en seguridad informática, califica el peligroso virus Flame como "la ciber-arma más sofisticada". El director de la empresa, Yevgueni Kaspersky, advierte que la vida en la Tierra tal y como la conocemos podría terminar por culpa de "ciber-terrorismo".
"No es una ciberguerra, es el ciber-terrorismo, y me temo que el juego sólo acaba de empezar. Muy pronto muchos países en todo el mundo se enterarán de esto sin duda alguna", dijo Kaspersky en una conferencia sobre seguridad cibernética celebrada en Israel.
Entre los posibles escenarios apocalípticos que se barajan, el experto citó la total desconexión de las redes como Internet (lo que generaría un auténtico caos en muchas organizaciones estatales y privadas del mundo) o fallos en el funcionamiento de plantas industriales y en la infraestructura de los estados, lo que pondría en peligro miles de vidas.
Los ataques del virus Flame, usado según los expertos para el ciberespionaje, podría ser lanzado por varios gobiernos. Su programa es demasiado complicado para ser elaborado por algunos grupos, denuncia un sociólogo de una universidad norteamericana.
Roland Benedikter afirma que hoy en día los ataques cibernéticos anteceden cualquier operación militar. Toma como ejemplo la estrategia estadounidense que no se basa en espías "tipo James Bond", sino en vigilancia de satélites y aparatos no tripulados.
Al mismo tiempo, en opinión del especialista, el control gubernamental sobre los ciudadanos a través de la red está aumentando cada vez más, llegando a limitar derechos y libertades de los ciudadanos. Los analistas opinan en tanto que la política del Gobierno de Estados Unidos en el ciberespacio podría impactar al propio país.