Argentina no pagará los 10.000 millones de dólares que Repsol reclama como pago por la expropiación del 51% de las acciones de la petrolera YPF anunciada por la mandataria argentina, según declaró el viceministro de Energía de la nación sudamericana, Axel Kicillof.
Dicha declaración se produjo durante el primer debate sobre el proyecto de ley de las autoridades argentinas que se celebró el martes en el Senado del país.
Asimismo el alto funcionario acusó a Repsol de ocultar la información real sobre YPF y apuntó que el Gobierno revisará el valor real de la empresa. En este contexto recordó que el presidente de la petrolera española, Antonio Brufau, había señalado que en 2011 "hubo niveles récord de inversión" en YPF, aunque Kicillof afirmó que la petrolera "tiene una deuda cercana a los 9.000 millones de dólares".
Por su parte, el ministro de Planificación Federal, Julio de Vido, quien también presenció la reunión, señaló que a Repsol no se le pagará la suma reclamada, sino "lo que fija" el proyecto de ley presentado por la presidenta de Argentina. De Vido precisó que la suma final que se pagará a la parte española contemplará los daños ambientales, así como la pérdida de productividad provocados por la gestión de Repsol.
La abultada deuda de Repsol hará que presione más a Argentina
Algunos expertos creen que la petrolera española Repsol va a presionar a Argentina para sacar partido del conflicto de la expropiación de YPF, anunciada recientemente por Cristina Fernández de Kirchner, ya que tiene una abultada deuda.
Así el profesor de economía política Julio Gambina señala que la petrolera española "tiene una deuda de la empresa YPF de casi 9.000 millones de dólares, una cifra equivalente a lo que está reclamando Repsol" como pago por sus acciones. Al mismo tiempo Gambina hace hincapié en que Repsol ha retirado de Argentina "el 97% de los excedentes generados en la explotación empresarial" y "ha incumplido los contratos de inversión original".
Repsol, que espera recibir una indemnización de al menos 10.500 millones de dólares por sus acciones en YPF, solicitó la ayuda del Gobierno español y buscó la protección de sus intereses en otras instancias, tales como la Unión Europea (UE). Esta organización ya ha reaccionado y el Parlamento Europeo pedirá que se estudie suspender parcialmente las ventajas arancelarias que la UE concede unilateralmente a los productos importados de Argentina.
En medio del revuelo por la decisión de las autoridades de esta nación sudamericana, el diario estadounidense The Financial Times ha publicado datos que señalan que Repsol negociaba la venta de la participación de control de su filial argentina YPF a una petrolera china. El presidente de Repsol, a su vez, reconoció haber recibido propuestas de varias empresas internacionales.