http://fr.euronews.com/ La deuda en España no es solo un problema macroeconómico. Centenares de familias se están quedando en la calle porque pierden su trabajo y no pueden pagar la hipoteca o el alquiler de su piso. En Barcelona, por ejemplo, se calcula que unas 350 personas se han visto obligadas a vivir en caravanas o coches. Es el caso de Silvestre y Lola, con dos niños, que se han instalado en un antiguo parque industrial de Barcelona. Silvestre trabajaba en una panadería hasta que perdió el empleo.
"No me van a ayudar en nada. Podemos beneficiarnos de un año de protección oficial, pero si no encuentro trabajo vamos a la calle", se queja Silvestre. "Con toda esta situación, me quedo aquí. Y hay mucha más gente así".
Situaciones como esta están desbordando los servicios sociales de los ayuntamientos, que sufren a su vez los recortes en los gastos y no pueden atender unas demandas cada vez mayores.
"Los contenidos deben ser exactamente los que estamos planteando en este momento", explica por su parte el responsable de los servicios sociales del ayuntamiento de Barcelona. "O sea, el derecho a una vivienda digna y, por tanto, a incrementar el parque de viviendas sociales en la ciudad y seguir trabajando en los centros de día con estas personas".
Las negras previsiones para la economía española tampoco auguran una mejora de la situación. Las administraciones públicas tendrán que recortar más y, el paro, superará este año los cinco millones de personas.