Ólafur Ragnar Grimsson ha hecho historia en Islandia al ser elegido por quinta vez como presidente del país. El veterano y controvertido político islandés ha obtenido el 52,5% de los votos en los comicios celebrados ayer.
Su principal rival en la contienda, la popular periodista Thóra Arnórsdóttir, apenas ha superado el 33,2% de las papeletas. Líder en todos los sondeos hasta hace unas semanas, Arnórsdóttir ha sido víctima de la habilidad del camaleónico Grimsson para conquistar al electorado en cualquier circunstancia.
De hecho, Grimsson, que durante años defendió la expansión de la banca en Islandia, mantuvo su popularidad en plena tormenta financiera tras forzar la celebración de los referéndos en los que los islandeses se negaron a devolver los ahorros perdidos por decenas de miles de británicos y holandeses tras la quiebra del banco Icesave.
En esta ocasión, ha dado la vuelta a los sondeos con un discurso contrario al ingreso en la Unión Europea, muy del gusto de un país en el que abundan los euroescépticos.
Su principal rival en la contienda, la popular periodista Thóra Arnórsdóttir, apenas ha superado el 33,2% de las papeletas. Líder en todos los sondeos hasta hace unas semanas, Arnórsdóttir ha sido víctima de la habilidad del camaleónico Grimsson para conquistar al electorado en cualquier circunstancia.
De hecho, Grimsson, que durante años defendió la expansión de la banca en Islandia, mantuvo su popularidad en plena tormenta financiera tras forzar la celebración de los referéndos en los que los islandeses se negaron a devolver los ahorros perdidos por decenas de miles de británicos y holandeses tras la quiebra del banco Icesave.
En esta ocasión, ha dado la vuelta a los sondeos con un discurso contrario al ingreso en la Unión Europea, muy del gusto de un país en el que abundan los euroescépticos.
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